Y del eterno paraíso...
Heme aquí, inundado por el desapego de un corazón herido, teniendo como firmamento la luz de mi alma, mi destino; la singularidad de mi causa perdida, la coincidencia del olvido "y con mis manos desmayadas y mis pies adoloridos" vaya ¡es como un grito!, si pudiera contar las veces en que te he perdido, ¡tú no sabes de guerra!, lo tuyo es el Sol y paraíso…ahora me encuentro cayendo en un infinito abismo; ese que por un instante me devolvió hacia ti; quitándome muchas veces mi propio suspiro. (Amor roto)
¿Dónde estoy? Que aun en mis sueños rotos, Caigo sobre un infinito desierto una y otra vez…el espacio y el tiempo no tienen sentido, la vida va mas allá porque...aun cuando me miro y toco el espejo, miles de fragmentos !explotan!. Aun tirado despierto recordándome a mí mismo el propósito de mi ser, veo a mi lado un Reloj de bolsillo viejo y en el olvido; marcaba mis horas y mis años vividos, grabado en dorado decía; lloraras mi partida, lloraras el olvido, lloraras el recuerdo de tenerme a tu lado y de haberme perdido. (Tiempo)
¡Dame mi paz Dios! que, En mi camino un mar de eterno espejo, resultado de un corazón maltratado y mal herido, reflejaba a medias sentimientos encontrados. Ponedme en un lugar bueno y seré bondadoso. Me habré equivocado mil veces pero sigo siendo legitimo, soy alegre, soy de ti una esperanza más en la que te devuelvo todos los días mi vida, doy lo que puedo con ansias, lo mejor de mi esta en ti y Dios es mi testigo, es simplemente el reflejo de una finita sonrisa esa por la que vale la pena luchar, esa por la que vale la pena vivir, esa por la que he buscado por años…arrastrando mi cuerpo, y la causa de todos mis viajes, la causa de levantarme con ánimos, la causa de amarte, la causa de vivir como nunca antes, la causa por la cual digo si a la vida y no a la muerte, el elixir del más preciado sentimiento, Esa por la cual si se extingue me marchare lejos. (Felicidad)
Coacción inversa, mi corazón va a estallar, y la sensación llevando la adrenalina por mi cuerpo no puede escapar, un sentimiento puro y efímero pero muy difícil de llevar. Me encuentro en la eterna dicha de mi soledad, dejadme aquí, necesito un momento para respirar. Por supuesto que ame lo inalcanzable, y aun así esperando que pasaran los días, pudieran justificar mi propio ser, confieso que !invades mi cuerpo ahora!, y es tan rápido que aun así corriendo, tapando mis ojos, mis labios, mi cuerpo entero…una fugaz tristeza explota, consecuencia absoluta…solo veríamos en nuestro propio ser un niño alcanzado por una infinita locura, la dicha que acompaña el atardecer, la infinita tristeza, la de gran profundidad en el olvido. Esa que nos ahoga... (Melancolía)