“El sabor dulce de la victoria es algo que no se puede describir”
No dejes que esos que esperan verte derrotado logren su cometido, demuéstrales que puedes a pesar de todo, a pesar de las circunstancias, de las piedras y palos en el camino. Rendirte no debe ser una opción, si alguien te hirió de algún modo, no dejes que esas heridas te doblen de tal forma que los demás se sienta victoriosos por tu derrota. Levántate, lava tus heridas, cúralas, véndalas, aguanta un poco el dolor, si tienes que llorar, llora! Pero seca tus lágrimas, levanta la cabeza, mira hacia adelante y celebra tu victoria.
El golpe más fuerte que puedes darle a alguien es hacer que te vean bien, radiante, sonriendo, y siendo feliz. No necesitas ofender con palabras ni desear el mal, con que te vean así es suficiente. Así como el pueblo de Israel enfrentó miles de obstáculos para llegar a la tierra prometida, tu también puedes! El pueblo de Israel celebró la victoria cuando pasaron el mar rojo en seco y luego vieron morir a todos los que les perseguían y hacían el mal. No necesitaron matar ellos con sus manos, mi decir palabras ofensivas, solo dejaron que las cosas se dieran, confiaron en Dios y eso bastó para asegurar su victoria. No caigas en provocaciones ni en el juego de los demás, sé diferente, y dales a saber lo fuerte y capaz que eres.
Feliz noche para todos!
By, @maguifalcon