Sembrar la semilla de la esperanza, la semilla que florece y da frutos a través de la educación; es la ilusión que muchos niños, adolescentes y jóvenes apuestan para un futuro mejor. Tal como lo plantea Freire, los caminos de la liberación son los del mismo oprimido que se libera: él no es una cosa que se rescata, sino un sujeto que se debe autoconfigurar responsablemente.
Los Latinoamericanos somos personas luchadoras, que defienden su identidad cultural y saben levantarse tras las adversidades, nos amparamos en la educación para salir de la opresión y así poder transformar y liberar la sociedad en que vivimos. Quizás a corto o mediano plazo parece una utopía, pero los grandes desafíos, sea cual sea la complejidad de los problemas, nosotros construimos nuestra propia historia. En este sentido, Zemelman alude que los sujetos que están detrás de los fenómenos que queremos estudiar y que son complejísimos; son sujetos múltiples que tienen distintas características, variados espacios, tiempos diversos, y visiones diferentes del futuro desde las cuales construyen sus realidades.
Asimismo, podemos citar parte de la canción
“si mi pueblo se derrumba yo lo reconstruyo”
Esta frase evidencia la necesidad de sobrevivir y transformar las adversidades de la sociedad. Igualmente, Habermas plantea que hay tres intereses que guían todos los aspectos de la vida humana; el interés técnico, el interés práctico y el interés emancipador. Estos intereses conllevan a la transformación social para satisfacer las necesidades humanas, a entender las relaciones humanas y sobre todo que los individuos sean libres y autónomos. Del mismo modo, Morín apunta que las relaciones humanas son prioritarias para la reconstrucción de los pueblos, además sostiene, es necesario que los humanos se comprendan para que haya empatía, identificación, simpatía y generosidad entre ellos.
En mi opinión, los pueblos avanzan en la medida que sus ciudadanos se pongan de acuerdo para prosperar, debe existir el diálogo entre todos los estratos sociales existentes en la sociedad y eliminar las grandes brechas entre los diferentes estadios sociales, pues cuando un estrato social no es tomado en cuenta por el gobierno de turno, es una bomba de tiempo social.