El poder de la palabra

Saludos mis queridos amigos hoy quiero platicar acerca del poder de la palabra y cómo influye en nuestras vidas, desde la concepción es determinante este poderoso estimulo, le permite al bebe agudizar sus sentidos y percibir el amor de sus progenitores.

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Es sin duda un factor importante para lograr un buen desarrollo en el aprendizaje además genera un estímulo-respuesta del individuo, tomando en cuenta este aspecto las palabras pueden construir o destruir, aliviar o enfermar, calmar o alterar dependiendo de cómo percibas y te entrenes a recibir cada mensaje, elevar nuestro nivel espiritual, mental, intelectual en equilibrio profundo hacia una reacción positiva.

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Es necesario aprender a escucharnos antes de dar una respuesta a nuestro emisor, escuchar no solo las palabras los gestos, el dolor y la frustración saber discernir el porqué de su conducta, escuchar para comprender y así poder dialogar, por lo que el dialogo exige respeto y humildad para no hacerse dueño de la verdad absoluta, el dialogo supone búsqueda de disposición a cambiar y dejarse tocar por la palabra del otro, para buscar el beneficio de ambos.

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En épocas antiguas la palabra era respetada, nuestros abuelos nos enseñaron a cumplir la palabra y la hacían realidad, se preocupaban de tratar de internalizar la honestidad y respaldar siempre la palabra con los hechos, por lo cual es importante desarrollar el sentido de saber escuchar y mirarnos ,estar atentos a percibir nuestro propio silencio para ver qué hay detrás de nuestras palabras, sentimientos, posees e intenciones, de nuestro comportamiento de vida.

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Aprender a mirarnos para ser capaces de vernos como conciudadanos, hermanos, aliados que anhelan un bien colectivo, mantener la mirada de esperanza en cambios que conducen al bien. Mirada que transciende toda circunstancia pudiendo descifrar el dolor, el hambre, la miseria y la angustia,así necesariamente se fusionan escuchar y mirarnos para poder mejorar el poder de la palabra con los ojos del corazón, cumplir cada propósito y frase para levantar la humanidad y dar sentido a la vida misma, dar respuesta oportuna a cada situación colocando el ser humano como prioridad en el cual vale la pena esperar cambios favorables a través del tiempo.