Hola amigos steemianos, saludos desde mi pequeño refugio en la fría y hermosa Colonia Tovar, Aragua en Venezuela.
Esta mañana me senté a leer la prensa (por internet porque comprarla es un lujo en este país) y me encontré con esta noticia:
Descubren el primer meteorito inmigrante y permanente en el Sistema Solar
2015 BZ509 es diferente al resto puesto que se desplaza en dirección opuesta; es decir, lo que se conoce como una órbita retrógrada.
En realidad no le presto mucha atención a este tipo de noticias sobre el espacio y las estrellas (aunque hay personas que piensan que vivo en ellas jajajaja) pero me puse a leerla y al enterarme que este meteorito “viaja” en sentido contrario del resto de los meteoritos y contra el movimiento “natural” de la gravedad, él como si nada viaja (y permítanme usar estas metáforas) mirando a todos los demás meteoritos en dirección contraria.
Esto me hizo pensar en mi propia vida, y créanme lo que les digo, me he pasado la vida viajando en contracorriente, yendo en dirección opuesta al resto de la sociedad, pues me molestan los dogmas implantados por la sociedad y organizaciones que intentan llevarme a donde no quiero ir si no hay una explicación lógica para hacerlo. Y hasta he hecho cosas sólo por el hecho de ser diferente.
Les cuento algo de mi vida, a los 18 años existía algo llamado “la recluta” en esa época la policía salía cada noche cada tres meses para recoger a todo joven de edad completa para prestar el servicio militar obligatorio. Realmente era un tormento salir de noche en ese tiempo, pues hasta en la puerta del cine de mi pueblo se colocaban dichos agentes del “orden público” (lo coloco entre comillas por sarcasmo jejeje) y allí agarraban a cuanto joven de edad militar saliera por ese portón. Afortunadamente el señor que proyectaba las películas en el cine era el abuelo de mi mejor amigo para aquel entonces y nos avisaba que nos quedáramos en el interior del cine hasta que la policía se retirara con sus camionetas llenas de pobres jóvenes llevados a prestar un servicio militar que no querían prestar. Entonces decidí hacer algo que nadie que me conociera pensó que haría. Me fui como voluntario al ejército. Me cansé de hacer lo que todos hacían, correr y esconderse, entonces no era normal hacer eso, hoy día sí es por voluntad propia que lo hacen los venezolanos. Tan extraño era eso en ese momento, que en el conscripto militar donde estaban todos los que ingresaban al ejército, estábamos 800 jóvenes y yo era el único voluntario y eso me dio el derecho de hacer algo poco normal en ese sitio, me dieron a escoger en qué unidad o batallón quería prestar mi servicio militar “obligatorio”.
Otra de las cosas que he hecho contracorriente fue dejar de consumir licor a los 17 años, todos mi amigos y yo bebíamos licor en las fiestas, bailábamos hasta amanecer y nos divertíamos sin ningún problema. Pero un día pensé, ¿por qué bebo si eso sabe horrible? y fue cuando caí en cuenta que sólo lo hacía porque estaba en grupo y si ellos lo hacían, yo tenía que hacerlo también. En la siguiente fiesta a la que fuimos, cuando destaparon la primera botella de ron cacique, les dije yo no quiero porque no me gusta. Mis amigos pensaron que estaba echando broma, porque siempre lo hago (echar broma), y me dijeron en tono de burla, “a pues, ¿te metiste a evangélico?” y yo muy serio y amablemente les dije, “no me da la gana y no bebo más porque eso sabe a m…” jajaja, aun recuerdo sus caras de asombro, pero algo que recuerdo de ellos es que siempre me apoyaron en todo lo que yo hacía sin criticarme o juzgarme o intentar obligarme hacer algo que yo no quería. Simplemente callaron y siguieron bebiendo ellos y eso sí, bailamos toda la noche con todas las chicas presentes. Y descubrí que disfrutaba más las fiestas estando sobrio.
Con estas dos muestras de cómo ha sido mi vida, solo quiero reseñar que no siempre debemos ir con lo que nos dicta la sociedad o lo “normal”. He disfrutado mi vida como soy, tal vez no le caiga bien a muchos, pero soy como soy y me gusta ser así. Analiza tu vida y piensa en este momento, ¿qué cosas estas haciendo simplemente porque te lo dicta una norma o reglas de una sociedad? ¿te hace feliz ser así? Te invito a dejar en los comentarios la respuesta a la siguiente pregunta ¿Qué cosa te gustaría hacer que aún no has hecho simplemente porque no es lo normal? Agradecería mucho leer tu respuesta.
Para terminar, una de las cosas que he hecho en mi vida y que no es “normal” para muchas personas fue que a la edad de 19 años, me hablaron sobre algo que cambió mi vida para siempre. Me hablaron de establecer una relación intima y personal con Jesucristo, me explicaron cómo me ama tanto Jesús que dio su vida por mí. Sin dudarlo y porque tenía esa necesidad en mi corazón, de sentirme amado (y no porque no había quien me amara, sino que no lo sentía) entonces en ese día, un 27 de agosto de 1985 le dije a Jesús “entra en mi corazón, perdona todos mis pecados, y hazme la persona que tú quieres que yo sea”. Y hoy soy quien soy gracias a mi Señor. Pruébalo tú también y no te arrepentirás. Habrán personas de tu familia y amigos cercanos que te dirán que eso no es normal, que tu creciste en una “religión x” que no traiciones la tradición de la familia. Pero en ti está, seguir la corriente o como mi amigo el meteorito 2015 BZ509 (que nombre más raro jejeje) ir en la dirección opuesta del resto de la sociedad de meteoritos.
Espero que te haya gustado mi post, deja tu respuesta a la pregunta que te hago arriba, y que Dios te bendiga. Nos leemos pronto.