Me lluevo sobre tus pies
aun cuando cambias de color
y te vuelas
y te oscureces
Sacas un monstruo iracundo de tu chistera
Y no puedo hacer mas que fascinarme en el prodigio de tu maldición y tu blasfemia
Me siento en primera fila para aplaudir el espectáculo de tu alucinación
No imaginas lo sedienta que estoy de sangre
Puede que siguiendo las señales en tus pies
consiga las huellas de mis propias llagas
para meter el dedo, para creer, para volarme la cabeza
para no entenderlo todo, para empezar a ver
para escuchar los restos de mis partes mutiladas
Haces una advertencia
recuestas tu cabeza
y comienza el viaje hacia el otro lado del espejo,
me dejo colar
cierro los ojos para ver mas lejos,
en la penumbra mi animal espera.