El corazón es ese importante órgano vital que casi siempre entregamos a quienes pensamos que son merecedores de formar parte de nuestras vidas, hasta que nos damos cuenta de todo lo contrario. Muchas veces porque no valorar con el cariño y confianza que lo hacemos cuando dejamos parte de nuestras vidas y emociones en manos muchas veces de personas que no merecen ni nuestra amistad.
El corazón es ese hogar que le brindamos a personas importantes en nuestras vidas; una de las formas más fácil y gráfica de ver, es poniéndolo desde el punto de vista de una arrendamiento, muchos llegan para quedarse por mucho tiempo, otros llegan y salen, pero también están los que llegan para destruir lo que con confianza les brindaste como espacio, pero son esos los que por mucho tipo han estado, intentan reparar los daños causados por quienes nada valoran. Muchas son las grietas o damos que pueden causar, pero hay algo mucho más importante que eso y es el amor que puedes recibir de quienes valoran lo que han recibido de ti durante mucho tiempo. Es gracias a ellos que ese pequeño músculo pero gran hogar, sigue creyendo que aún existen personas que valoran lo que podemos brindar, que no necesitan pagar cantidades de dinero para que cuiden y valores lo que tienen.
Tengo un corazón inquebrantable porque son muchos los que allí viven y que si habláramos de tamaño, se quedaría corto para la cantidad de personas que en el viven y que han vivido durante mucho tiempo, sabiendo también que son muchos los que llegarán, que aunque sabiendo por experiencias que no todos serán los mejores, no cierro las puertas a ninguno, pues, es largo el camino que debo recorrer y de todos debo aprender, son momentos y etapas que me tocan vivir a las que no puedo ni debo limitarme, pero que si debo dar prioridad a quienes han estado conmigo durante todo este arduo recorrido. Por esta razón no me arrepiento de haberle abierto las puertas a quienes por un momento pensé que eran fieles a la lealtad y que aunque intentaron quebrantarme emocionalmente, allí estuvieron quienes han estado conmigo durante todo este tiempo dándome las fuerzas y el apoyo de seguir adelante y creyendo en la buena voluntad del mundo.