Los perros necesitan hacer ejercicio, independientemente de las condiciones meteorológicas. En la nieve o la lluvia, necesitan estimulación mental y física. Dicho esto, sin duda hay algunos días en que el clima puede ser demasiado caliente, demasiado frío o lluvioso, por lo que resulta muy útil tener a la mano una variedad de ideas para calmar el aburrimiento de tu mascota en la comodidad de tu propia casa. ¡Aquí tienes algunas ideas que pueden resultarte muy útiles!
Juguetes dispensadores de alimentos: estos juguetes son un mecanismo invaluable para mantener a raya el aburrimiento de un perro. Básicamente son juguetes clásicos de goma que se pueden rellenar con una gran variedad de golosinas. En los últimos años, el mercado de distribución de juguetes dispensadores se ha ampliado enormemente y existe un montón de productos nuevos y emocionantes disponibles.
Cacería de croquetas: si colocas las croquetas de tu perro en su plato, es probable que esté vacío antes de 15 segundos y tu perro te mire al terminar como diciendo, “¿eso es todo?” En cambio puedes poner las croquetas u otro alimento en lugares donde tu perro las encuentre guiándose por su olfato. O sea, en lugar de volcar la comida en su plato, puedes esconder pequeños montones de comida en la casa y dejarlo libre para que los cace. Inicialmente, esconde la recompensa en lugares muy fáciles de encontrar, pero a medida que tu perro se desenvuelva mejor en este juego, comienza a esconder la comida en puntos más difíciles de encontrar.
Tirar y buscar: Tirar algo y que su perro vaya a buscarlo es uno de los juegos clásicos para perros y no requiere mucho espacio. Los pasillos de nuestras casas suelen ser un buen lugar para practicar esta idea.
Juegos de entrenamiento: el entrenamiento ofrece un gran ejercicio mental para el perro y una buena sesión de ello puede cansar a un perro más que varios paseos al día. Practicar muchas sesiones de entrenamiento ayuda a cansar el cerebro de su perro, aliviando el estrés y el aburrimiento. Enseñarle nuevos comportamientos puede ser fantástico para que ambos logren sentirse felices y en confianza.
Una cita para jugar: si su perro tiene un compañero de juegos preferido o un amigo simplemente, considere programar una cita para que jueguen en un día lluvioso. Antes que el otro perro llegue, asegúrese de recoger todos los objetos frágiles y de valor, además debe sentirse dispuesto a aceptar toda clase de ruidos que ambos amigos puedan hacer para divertirse.
Una excursión de socialización: si usted no puede llevar a su perro a dar un paseo, considere la posibilidad de llevarlo a dar una vuelta y hacer una “visita de diversión” a la oficina del veterinario. Esto servirá para enseñarle que las visitas al veterinario pueden ser divertidas.
Jugar a las escondidas: jugar a las escondidas es una forma de ejercitar la mente de su perro, su cuerpo y la habilidad de recordar. Cada miembro de la familiadebe abastecerse de golosinas, esconderse por turnos en toda la casa, llamar al perro y recompensarlo cuando llegue a ellos.
