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Es fundamental tener paciencia, estas etapas suelen pasar muy rápido y ni cuenta nos damos cuando ya nuestros hijos han crecido, el tiempo pasa muy rápido, es por ello que debemos disfrutar cada día y brindarles a nuestros hijos amor y comprensión, sin ser permisivos y dejando muy claro el respeto y enseñando principios y valores, pilares fundamentales para que sean adultos ejemplares.
Ahora bien, ¿Qué son las rabietas? Es cuando los niños se enfadan, impacientan y lloran a causa de un hecho que les causa temor y/o confusión, dependiendo de la edad del niño pueden ser más intensas unas de las otras, ya sea, porque no quieren ningún tipo de control, ya empiezan a darse cuenta que son seres independientes y tienen la necesidad de explorar todo lo que tienen alrededor, y ellos a tan corta edad no tienen la capacidad de expresarse con palabras como los adultos (están aprendiendo a hablar) y se les hace un poco difícil decir lo que sienten o quieren.
Nosotros como padres debemos actuar inteligentemente y enseñarles como ir manejando sus emociones sin reprimirlas, lo peor que podemos hacer los padres es gritarles, maltratarlos o pegarles, eso jamás lo debemos hacer, debemos enseñarlos con palabras simples, que puedan entender con facilidad, que sus emociones son completamente normales y la mejor forma de canalizarlas hasta alcanzar inteligencia emocional, y lo más importante que los amamos, “todo con amor sale mejor”.
Gracias por leer, sean felices.