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El que está sumergido en la copa,
no se percata de la copa, es la copa.
Sólo lo que no-es copa,
puede experimentar la copa.
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Todo es mental, por eso todos los pensamientos tienen su efecto en la materia.
El Kybalion de Trismegistro nos explica que la copa es mental.
Hacer las cosas, sin hacerse cosa, en las cosas.
El Tao Te King de Lü Tzu nos pide no hacernos copa.
No hay manifestación sin pares de opuestos.
La Doctrina Secreta de Helevna Petrovna Blabatsky. La copa es par, polar, es tesis y antítesis.
Relajemos entonces esos pares de opuestos que nos constituyen, para que la unión, el yoga se dé, la tensión del movimiento, la lucha separa los polos, la relajación del no-movimiento los une. Entonces busquemos en nosotros mismos, en el microcosmos; la subversión del ser, al no-ser, desbórdate de la copa en la que te ahogas prisionero, la genialidad espera el desbordamiento, como el genio salir, trascender la lámpara, y ahora poder ser consciente de esta, la iluminación de ver donde nos estábamos ahogando, como persona y como pueblo.
Primero hacemos la síntesis de la tesis y la antítesis. Después aceptamos la matesis como consecuencia natural.
El genio es un estado del ser,
en potencia en todos los seres,
florecido en los jardineros.
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