Imagen propiedad de @lanzjoseg
Mi papá siempre fue un hombre diferente incluso en sus gustos, no le gustaban las cosas lujosas pero si las cosas de calidad, priorizaba el buen funcionamiento antes que las estética, no se dejaba impresionar por autos nuevos, sin embargo, el mantenía siempre su carro en buen estado de máquina, no podía dejar pasar algún pequeño ruido del motor u alguna otra cosa, acudía siempre a su mecánico de confianza y trataba de mantener el carro lo más original posible, era un modelo Malibú creo que del año 78 y aun en los 90 mientras yo crecía el lo mantenía en buen estado.
El carro de mi papá seguía manteniendo su aspecto clásico, con un radio y reproductor de música que solo admitía el formato de cassette, cuando en mi casa mi mamá compró en el año 2000 un reproductor de CD, ya era bastante popular el formato y mi papá contaba con discos compactos que algunos de sus clientes músicos le habían regalado, pero por mucho que nosotros le insistimos a el que se actualizara y cambiara el reproductor del carro el nunca lo hizo.
Muchos años después cuando mi papá enfermo y vendió su preciado carro, este aun mantenía el viejo reproductor, cuando pienso en mi papá y en sus acciones cotidianas me doy cuenta que en detalles como estos sus decisiones eran muy personales, el siempre iba en su propio camino y no se podría decir que seguía lo que los demás hacían, no se trataba de un asunto de dinero porque estoy segura que mi papá pudo haber cambiado no solo el reproductor del carro sino que pudo haber comprado un carro más moderno, pero el era así, apreciaba mantener su carro original y ahora de adulta le encuentro sentido.
Actualmente los cambios son demasiado rápidos, la obsolescencia de los productos es programada, hoy sale a la venta un modelo de teléfono cuando al poco tiempo hacen el anuncio de otro con supuestas mejorías, cambios tan relevantes como cambia el formato de la música no suceden, los cambios son a veces imperceptibles e irrelevantes, no obstante existe una necesidad y hasta obsesión de la gente en estar cambiando y actualizando, se ha hecho de los cambios una regla que hay que cumplir sino se quiere quedar atascado en el pasado, esos aspectos del mundo acelerado actual a veces me parecen muy nocivos a la salud de las personas que se ven afectadas por tanto consumo.
Por supuesto ser una persona tan apegada a lo clásico o antigua a veces puede presentar inconvenientes, creo que es necesario avanzar y no quedarse aferrado, pero analizando las cosas desde una perspectivas más madura, entiendo la decisión de mi papá, el era un hombre que no se dejaba arrastrar o ser seguidor de los demás, creo que actualmente un poquito de esa característica no le haría mal a la gente, pues valorar las cosas y darles uso necesario es algo positivo, postergar el cambio de los objetos que aun funcionan es algo que me parece bien, por eso me gusta tanto las restauraciones de cosas a su modelo original, creo que nos hace apreciar más lo que tenemos.
Esta es mi entrada al Concurso TopFiveFamily Observa Piensa Escribe. Invito a participar a @yetsimar