Aceptar la vejez del que se siente viejo
En los últimos tiempos se me ha mostrado el tema de longevidad de diferentes formas, permitiéndome mirar este proceso y verdad natural con tolerancia y respeto tanto para mi humanidad como para los que me rodean. Lo que me resulta difícil de comprender sobre esta etapa inevitable en nuestras vidas es ver como algunas personas de 60 años se consideran ancianos con pocas posibilidades para evolucionar, aprender cosas nuevas, disfrutar y vivir a plenitud.
Obviamente el cuerpo por condición natural con los años va perdiendo lozanía, resistencia, nutrientes siendo esto los primeros indicios de una nueva etapa de vida donde requerimos un cambio de hábitos para la preservación y cuidado de nuestro ser, y en la actualidad existen infinidad de recursos para lograrlo que ofrecen al hombre y mujer mayor un bienestar integral.
Sin embargo he visto con inquietud cómo personas específicamente de la ciudad en la medida que avanzan en edad van perdiendo el sentido de vivir armoniosamente, por ejemplo los que creen que la vejez es un deterioro físico y mental, entonces ante ello están las personas que ven a los fármacos industrializados y las visitas médicas como la única opción para prolongar la vida, algunas inventan enfermedades, otros se aferran a lo material y comida en exceso como única fuente o motivación para vivir.
Están los que al experimentar la jubilación consideran que hasta allí llego el camino, los que creen que la vejez es solo para cuidar a la nueva generación familiar, también están los que siempre tuvieron la posibilidad de trabajar para empresas privadas y al ser despedidos sienten la vida no vale más, otros que transcurren sus días entre expresión de calamidades y juicios hacia todo lo existente, más los que se aíslan y viven del silencio, o los que determinan su verdad como absoluta sin posibilidad de mirar opuestos en el peor de los casos acuden al alcohol o suicido.
Confieso esta verdad es para mí difícil de comprender y tolerar, la vida es demasiado hermosa y llena de oportunidades para todos que me resulta increíble saber que hay personas empecinadas en vivir solo desde la sombra y en el adulto mayor me sorprende aún más. Es una situación que me toca de cerca con algunos sexagenarios cuyas conductas son similares a las descrita en el párrafo anterior, experiencia que me resulta alarmante, en los que reconozco conscientemente y con respeto su historial de vida, hallando allí razones muy claras e íntimas de sus actitudes, y en base a ello deseo inmensamente su sanidad física, emocional, espiritual y mental.
No soy quien, para cambiarlos, pero ante las situaciones que me inquietan procuro siempre buscar soluciones y sí creo tengo posibilidad de ofrecer bienestar invito a mirar las cosas desde otro panorama, menos oscuro y con más oportunidad de prosperidad. Hay casos particulares que no logran ver lo que les presento, ante ellos simplemente respeto condición y decisión de vida.
Esa verdad difícil de aceptar la vejez del que se siente viejo la voy aprendiendo en el día a día que es la VIDA, reconociendo que la misma es corta y por ello al transitarla es preciso vivirla, amarla, cuidarla, sentirla y disfrutarla a plenitud con todo lo que nos rodea, siendo nuestro cuerpo el receptor de todas las señales de cambios y mejoras para nuestra preservación. Todo lo que comento es mi verdad que no es absoluta y que la comparto con quien bien desee consentirla.
ENGLISH VERSION
Accepting the old age of the one who feels old
In recent times I have been shown the subject of longevity in different ways, allowing me to look at this natural process and truth with tolerance and respect for both my humanity and those around me. What I find difficult to understand about this inevitable stage in our lives is to see how some people in their 60's consider themselves old, beings with few possibilities to evolve, learn new things, enjoy and live to the fullest.
Obviously the body by natural condition with the years is losing freshness, resistance, nutrients being this the first signs of a new stage of life where we require a change of habits for the preservation and care of our being, and today there are plenty of resources to achieve this that offer the older man and woman a comprehensive welfare.
However, I have seen with concern how people specifically in the city, as they advance in age, are losing the sense of living harmoniously, for example those who believe that old age is a physical and mental deterioration, then there are people who see industrialized drugs and medical visits as the only option to prolong life, some invent diseases, others cling to the material and overeating as the only source or motivation to live.
There are those who when experiencing retirement consider that this is the end of the road, those who believe that old age is only to take care of the new family generation, there are also those who always had the possibility of working for private companies and when they are fired feel that life is not worth more, others who spend their days between expression of calamities and judgments towards everything that exists, plus those who isolate themselves and live in silence, or those who determine their truth as absolute without the possibility of looking at opposites, in the worst case they turn to alcohol or suicide.
I confess this truth is difficult for me to understand and tolerate, life is so beautiful and full of opportunities for everyone that I find it incredible to know that there are people stubborn in living only in the shadows and in the elderly I am even more surprised. It is a situation that touches me closely with some sexagenarians whose behaviors are similar to those described in the previous paragraph, an experience that I find alarming, in which I consciously and respectfully recognize their life history, finding there very clear and intimate reasons for their attitudes, and based on this I wish immensely for their physical, emotional, spiritual and mental health.
I am not the one to change them, but in the situations that disturb me, I always try to look for solutions and if I believe I have the possibility to offer wellbeing, I invite them to look at things from another perspective, less dark and with more opportunity for prosperity. There are particular cases that do not manage to see what I present to them, before them I simply respect condition and life decision.
That difficult truth of accepting the old age of the one who feels old I am learning it in the day to day that is the LIFE, recognizing that it is short and therefore to transit it is necessary to live it, love it, take care of it, feel it and enjoy it to the fullest with everything that surrounds us, being our body the receiver of all the signals of changes and improvements for our preservation. Everything I say is my truth that is not absolute and that I share it with whoever wishes to consent to it.
