El paso único para alegrar el corazón de Dios.

Efesios 4:13 hasta que todos lleguemos (...) a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.
Mateo 3:17 Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
Proverbios 10:1 El hijo sabio es la alegría de su padre.
Santiago 3:17 La sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.

Para el hijo de Dios, Jesucristo es el estándar, el punto de referencia, el centro, el ejemplo a imitar y la meta a alcanzar. De forma paralela e inseparable, el hijo de Dios quiere alegrar a Dios, y podemos ver en Jesucristo la forma de causarle esa alegría, pues el mismo Padre habló diciendo que Jesús le causaba suma alegría.

Si a un padre humano le alegra ver sabiduría en su hijo ¡cuánto más alegra al Padre de Sabiduría ver a sus hijos actuar con sabiduría! Jesús fue y es el perfecto ejemplo de vivir conforme a la sabiduría celestial, dándonos el ejemplo de cómo causar alegría a nuestro Padre.

Tengamos siempre en nuestro corazón el alegrar el corazón de nuestro Padre, que vivamos la sabiduría celestial, como la vivió Cristo, de manera que Dios pueda vernos y pensar "Este es mi hijo amado, él me causa mucha alegría", como alguien me dijo una vez, "adorar a Dios significa alegrarle".

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
Join the conversation now
Logo
Center