Hola amigos literatos, hoy quiero compartirles uno de mis poemas en prosa de mi autoria, el cual me inspiré en un momento de mi vida en dónde sentí que el tiempo estaba cambiando todo a lo que estaba acostumbrado, y caí en cuenta de la existencia de esa nostalgia que traen los cambios de la vida. Estoy seguro que muchos pueden identificarse con ese sentimiento nostálgico de cuándo una época felíz acaba y sólo te queda lamentar el no haber valorado más los momentos y las personas que estaban.
La lluvia caerá una vez más a llenar mis pensamientos con recuerdos impregnados de nostalgia, con intentos inútiles trataré de salir de aquella nube oscura que no me deja consiliar el sueño por las noches, y que desaparece por el día solo cuando logro distraer mi mente en actividades insignificantes que puede que aporten algo (o no) a mi vida, pero sin embargo me anclan por momentos al presente.
Algo parecido me sucede con el atardecer, los ultimos rayos del sol manchandome la piel de un hermoso rojizo siempre logra sacar a la superficie los recuerdos de un pasado distante, donde al parecer era feliz o quizás era solo una vaga ilusión de este corazón tonto que no sabe desatarse de aquellos días donde había gente que ya no esta, y los lugares parecian llenos de un sonido que llamaría alegría.
Tristemente me reprocho malgastar el tiempo pensando en aquel mundo que ahora solo existe en mis recuerdos y al que no puedo volver, mientras la vida se pasa y pasan los instantes en los que podría estar riendo, conversando, aprendiendo, bailando, viviendo, pero es cierto que la nostalgia es adictiva y no perdona almas románticas.
ENGLISH
Hello literary friends, today I want to share with you one of my own prose poems, which inspired me at a moment in my life where I felt that time was changing everything I was used to, and I realized the existence of that nostalgia that life changes bring. I am sure that many can identify with that nostalgic feeling of when a happy time ends and you only have to regret not having valued more the moments and the people who were there.
The rain will fall once again to fill my thoughts with memories impregnated with nostalgia, with useless attempts I will try to get out of that dark cloud that does not let me sleep at night, and that disappears during the day only when I manage to distract my mind in insignificant activities that may contribute something (or not) to my life, but nevertheless anchor me at times in the present
Something similar happens to me at sunset, the last rays of the sun staining my skin a beautiful reddish color, it always manages to bring to the surface the memories of a distant past, where apparently I was happy or perhaps it was just a vague illusion of this foolish heart who does not know how to let go of those days where there were people who are no longer here, and the places seemed full of a sound that would call joy.
Sadly, I reproach myself for wasting time thinking about that world that now only exists in my memories and to which I cannot return, while life goes by and the moments in which I could be laughing, talking, learning, dancing, living, but It is true that nostalgia is addictive and does not forgive romantic souls.
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