Hola a todos los buenos lectores de esta plataforma, Hoy vengo humilde y cariñosamente a participar en el concurso Reír es gratis, Anécdotas de aniversario, que ha sido llevado a cabo por @lisfabian. Esperando que mi entrada sea agradable y divertida para todos.
El día que casi casi.
Ejecutando las maracas en el Ensamble Mixtela.
Fue una noche de mucha emoción, por el gran cariño y admiración que mis compañeros de música y yo le teníamos a tales maestros. Luego de hacer lo nuestro en el escenario, fue el momento de disfrutar la parte más importante de la noche, el concierto del Grupo Raíces, yo por eso antes había apartado un privilegiado puesto en la segunda fila del teatro, para apreciar muy de cerca la música.
Como no se cumplen treinta años todos los días, previo al concierto el grupo hizo una presentación de muchas fotografías tomadas durante toda su historia acompañadas de cuentos y anécdotas acumuladas en esos años, lo cual agradecí y disfruté mucho. Pero mi apreciación se veía constantemente interrumpida por un trío de personas delante de mí que reían a carcajadas como si estuvieran en cualquier otro sitio que no fuera un concierto.
Poco a poco me fue incomodando más la actitud de estas personas, un señor grande, obeso, totalmente calvo acompañado de un par de damas que reían con él. Me pareció ofensivo tomando en cuenta la importancia del momento y de la magnitud de artistas que en el escenario se presentaban.
Al poco tiempo ya me encontraba realmente incómodo, preparando el discurso que le diría al sujeto si seguía carcajeándose durante el concierto: "Disculpe señor, pero los que estamos en esta sala es porque realmente disfrutamos la música de Raíces, por lo que nos interesa apreciarla sin su bullicio, haga el favor de callarse".
Si aún no me había levantado a increpar a los alegres risueños, es porque me interesaba escuchar la historia de la canción "Señor Jou" compuesta por el cuatrista Pablo Camacaro y que ha sido un ícono en la cultura musical de Venezuela. Contaba el maestro Domingo Moret que dicho tema fue hecho en honor a un personaje muy querido por ellos y que había sido esencial en el crecimiento de la agrupación, pues fue él quien se interesó en patrocinar la mayoría de sus discos y giras. Añadió también que esa noche contaban con su grata presencia, por lo que pidió al público que le brindara un cálido aplauso.
Fue cuando se levantó a recibir el cariñoso elogio del público, aquél calvo risueño a quien estuve a punto de mandar a callar, el mismísimo Señor Jou.