Yo soy dulcera y dos de mis amigas son reposteras o les gusta hacer dulces y postres. En mi caso, con los dulces cabe el refrán: “El muchacho que es llorón y la madre que lo pellizca”.
El pez muere por la boca, quise decir, por el dulce. En la madrugada le quito los dulces que le regalan a mi mamá. Ella se molesta y me grita: “Abusadora”.
Así rinde más. Y a mi hija cada vez que les compro una chupeta, galleta, chocolate, les cobro una alcabala: un pedacito, una mordidita, un chupito.
Pero de todos los dulces o postres, me gustan o fascinan dos impelables en mi lista chuchera o dulcera. Se trata del dulce de leche en todas sus presentaciones: conserva, arequipe, leche condensada, con coco.
El otro es la torta de chocolate. Esa es una delicia. Me gusta especialmente las tipo marquesa, tipo biscocho, tipo pudín, con galletas María, acompañada de quesillo o bañada en leche condensada.
La combinación perfecta para mí. Cuando estoy en vísperas de mi cumpleaños,o algunos de mis familiares, les digo a mis amigas que hagan la torta de chocolate en cualquiera de sus presentaciones y que la bañen de leche condensada. Yo les compro los ingredientes.
Y nunca, nunca puede faltar una tortica acompañada de una buena bebida.
Ingredientes:
1/2 kg de harina de trigo leudante
1/2 kg de azúcar
250g de margarina
4 huevos
50g de leche(para mezclar con agua)
200g de cacao (para que quede full achocolatada)
Vainilla.
La preparación es sencilla, separó las yemas de las clara de huevo, mezclo las yemas con el azúcar y la mantequilla previamente mezcladas, luego se añade la leche líquida y el harina poco a poco alternando con el cacao.
Se lleva al horno que debe estar precalentado y se deja por aproximadamente 1hora.
No tengo fotos actuales, pues en estos días no he hecho torta , pero quería igual compartirles mi manera de hacerla.
El dulce de leche lo añado en medio de la torta, es decir la divido en 2 capas y unto el dulce.