Catarsis...

Fue una palabra que llamó mi atención, un día viendo la serie en Netflix sobre el neurólogo Sigmund Freud, padre del psicoanalismo. Aunque hasta ese momento no conocía el término, ya hace algún tiempo venia practicando y experimentando el poder de la escritura catártica. De hecho encontré en Wikipedia este concepto:

"Josef Breuer y Sigmund Freud, iniciadores del psicoanálisis, retomaron este concepto en sus primeros trabajos, y denominaron método catártico a la expresión de una emoción presente reprimida o recuerdo pasado reprimido durante el tratamiento, en estado hipnótico o mediante la psicoterapia, lo que generaría un "desbloqueo" súbito de dicha emoción o recuerdo, pero con un impacto duradero (y le permitiría luego al paciente, por ejemplo, entender mejor dicha emoción o evento o incluso hablar ampliamente sobre ello)."

Desde niña he tenido la imperiosa necesidad de escribir. Durante mi adolescencia, llené cuadernos y libretas con lo que sentía. En muchísimos casos, escribía lo incomprendida que vivía. Las injusticas, era como gritar sin ser escuchada, porque todo lo que escribía era para mi. Llegue a mi vida adulta y seguí escribiendo, pero me canse de escribir de tristezas, incomprensiones. Así que en el año 2017 comencé a educar mi escritura, es decir, transformar lo que escribía en una creación literaria.

Comencé con una extraordinaria instructora: Ingrid Chicote. Ella, poeta, editora, redactora, escritora y terapeuta me mostro que podía trasformar mis escritos en algo mágico y liberador. Con ella he realizado muchos talleres que me han ayudado a liberar mis emociones y sentimientos. El año 2020, en plena pandemia, fue el año más significativo. Vi cristalizarse un sueño que veía lejano, publicar mis escritos. Me integré a otros talleres de creación literaria. Me integré al grupo del Facebook del Profesor Williams Alberto Hernández llamado: Encuentro Latinoamericano de Poetas "La Victoria". Allí conocí a La Profa. Yurimia, ella nos impartió un taller magnifico que encauso mis pensamientos.

Apenas estoy comenzando a conocer y usar el poder de esta escritura, y personalmente me hace sentir libre. Este espacio, también me ha permitido soltarme, expresar lo que siento. Una vez más agradezco al universo por tan hermosa oportunidad.

Gracias por sacar de tu tiempo y leer estas líneas.