Cena navideña en Palmira, 2016.
Muchas veces en tu vida no vas a ser feliz… debes tener algo significativo, ese es el barco que te llevará a través de la tormenta.
-Jordan Peterson.
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A Palmira llegamos a un hotel en el centro, allí estaba Cheos, que se había ido desde Medellín en bicicleta, nosotros llegamos con nuestras bicis en el autobús jajaja.
Mi bicicleta, la llevamos desde Medellín.
Cheos en "la Roja"
Palmira es una ciudad que tiene un lugar muy especial en nuestros corazones, allí hicimos muy lindos amigos, crecimos mucho como artistas y como personas.
En esta ocasión estuvimos unos meses, coordinando el tema de viajar en bicicleta y en general simplemente pasándola bien, yendo a lugares lindos y dedicados a poner nuestras bicicletas a punto para viajar en ellas. No tenemos casi fotos, creo que no teníamos celular en ese momento.
De Palmira salimos en bicicleta para Popayán, una ruta no muy recomendable para principiantes en esto de viajar en bicicleta, nosotros íbamos un poco bastante mal organizados y precarios sobre todo en el tema de equipamientos para el frío, material térmico para acampar y ese tipo de cosas.
Esta foto nos la tomó una pareja que iba viajando en moto, tuvimos una linda charla. Enero del 2017.
El tema es que cuando pasas El Bordo, Rosas, Piendamó... Ya comienzas a subir, comienzas a sentir la temperatura, la variable de oxígeno y todo se vuelve más exigente, sin embargo...
Fue un viaje que se sufrió pero se gozó, jajaj, la pasamos muy bien, tropezamos a muchas personas en el camino y tenemos un sinfín de anécdotas y aprendizajes de esos días.
Popayan, Junio del 2017.
Nuestra primera vez en Popayan estuvo bien chévere, en ese entonces no habíamos experimentado un clima tan frío y húmedo. De aquellos tiempos recuerdo mucha lluvia y mucho trabajo jaja.
Nos quedamos en un hospedaje bien lindo, unas personas muy amables. No tenemos muchas fotos, pero tenemos algunas de Plutón, un compañero muy especial que estuvo con nosotros un tiempo corto pero bastante enriquecedor...
Plutón fué un perrito que Natalia decidió adoptar de una veterinaria cercana al hospedaje, en Popayán.
Plutón era de una linda raza, Natalia lo conoció cuando estábamos comprando comida de gato. En una veterinaria que entramos estaba allí, en una esquina acostadito, se levantó a tomar agua con mucha dificultad, cuando Natalia lo vio fue amor a primera vista, nos contaron que fue un perrito que llegó al comedor para animales que colocaban en el frente del lugar, que estaba muy malherido, con el pelo enmarañado y desnutrido, pero que ya se estaba reponiendo y que lo estaban dando en adopción.
Gato luna y Plutón se llevaron muy bien.
En la siguiente escena, el perrito estaba en nuestra habitación de hotel conociendo al gato luna, con quien entablaría una hermosa amistad gato-perro :')...
Plutón y Mambo, el perro de una finca donde estuvimos unos días.
Plutón se recuperó rápidamente de sus malestares, en un par de semanas pasó de ser un perro desnutrido, desanimado y maltrecho a ser un perrito gordito, juguetón y vivaz. Jugaba mucho con el gato Luna y lo defendía de Mambo, ya que Mambo como buen perro de finca quería comerse al gato XD.
:)
Partimos en bicicleta, con Plutón y con el gato Luna en camino a Palmira... ¿A Palmira, valle del cauca? Sí, a Palmira de nuevo.
La verdad en ese entonces no teníamos nada muy claro, queríamos seguir viajando pero no teníamos nada parecido a una ruta que quisieramos tomar, o algo. Además no teníamos tantas habilidades en fino arte de traviajar y ehm, digamos que estábamos "buscándo nuestro rumbo".
En el camino sucedió algo horrible, íbamos saliendo, el mismo día de las fotos de arriba, por una parte linda de la carretera bajamos al perrito para que camináramos un rato, él estaba muy feliz, pasó un auto a toda velocidad y lo atropelló.
Imagínense la situación.
Una carretera después de Cali y antes de un lugar llamado Santander de Quilichao, nuestras bicicletas y todas nuestras cosas encima de ellas, Natalia y yo solos ahí, en medio de tal desdicha.
Fue horroroso, no sé qué más decir.
Unas personas hermosas del costado de la carretera nos dieron refugio, ellos fueron la luz en medio de ese desastre. Nuestro eterno agradecimiento con esas personas.
Al día siguiente tomamos un autobús hasta Santander de Quilichao, y luego otro hasta Palmira.
El gato luna, en casa de unos cristianos.
Llegamos al mismo hotelsito que conocíamos, procuramos arrendar un lugar más o menos rápido y luego de un par de mudanzas (amigas fiesteras, cristianos raros) caímos en un lugar bastante cómodo y tranquilo.
El gatito Luna, cómodo y tranquilo.
Acá es donde la cosa se pone interesante, ya verán por qué les decimos que Palmira tiene un lugar muy grande en nuestros corazones, lo primero que me gustaría mencionar es que estuvimos bastante tiempo en esa ciudad, lo cual nos permitió conocer a muchas personas "locales" y hacer bastantes amigos.
Palmira, parque "La Factoria", Julio del 2017.
También nos dio chance a hacernos varios cambios de look, jajaja...
Nat Red
Nat Blue
Nat con mostacho
Yo por mi parte;
Jhon rastafaray
Jhon gente de bien
También comenzamos a aprender nuevas cosas, Natalia se tomó más en serio el tema de los malabares, y diseñó unas artesanías hermosas, yo empecé a practicar bastante cuerda floja y otras cosas como la magia, también decidí cambiar mi bicicleta por un humilde computador portátil.
Artesanías
La bicicleta que cambié.
Portátil VIT que le cambié a un paisano en Cali (es cerca a Palmira)
Mi intención con el portátil siempre fue claro, buscar la manera de generar ingresos con algún tipo de trabajo, al mismo tiempo que subía contenido a redes y bueno, para ver películas y series, obvio!
Así que a los pocos meses aprendí sobre criptomonedas y empecé a dictar cursos y asesorías, formé un club de "day trading" y otro de educación y formación para traders.
Está gratis en youtube #pirate
Al poco tiempo pude comprarme otro portátil, y un celular de la mano de las criptomonedas.
Como buen day trader, me la pasaba mirando gráficas...
No precisaba más.
Esto fue super importante para nosotros, porque nos abrió la mente al trabajo on line, y todo eso ha desembocado en que varios años después yo esté aquí escribiendo esto y tú estés allí leyéndolo en esta hermosa blockchain.
Lagata Agatha llegó a nuestras vidas :)
Otra cosa super importante es que ella llegó a nuestras vidas, Natalia la adoptó de la calle, esa es otra linda historia que contaremos en detalle después.
Ellas <3!
Se llevan bien desde siempre, son hermanitos de crianza :)
La pasamos muy bien en Palmira
Al cabo de ya un año y vaaarios meses, empezaron las ganas de seguir el viaje, aunque no habíamos dejado de visitar otros lugares cercanos a Palmira (Tuluá, Cali), ya sentimos ganas de movernos. Más que nada eso, ganas de movernos... Como aún no teníamos una ruta bien clara, y el mundillo cripto se estaba moviendo bastante allá, decidimos ir a Medellín nuevamente...
Ese día hicimos un pequeño viaje a Cali, nos detuvimos a tomarnos esa foto.
La bici de Natalia la vendimos por Marketplace a una señora súper adorable. La bici donde aprendió a manejar.
También vendimos otra bicicleta que había cambiado por un kit de tattoo y otras cosas que me había comprado para aprender a tatuar, a la final como que decidí aprender a tradear jaja...
El kit que compramos por MercadoLibre, y lagatha de fondo <3
Y nos fuimos a Medellín, recuerdo que en una ocasión salimos con todas nuestras cosas y luego nos devolvimos, se nos hizo tarde para tomar el autobus en Cali o algo así.
Naty friend <3
En Medellín ya sabíamos un lugar donde podíamos llegar, eso es cool...
En ese entonces llevábamos a los gatos en su suit móvil de 2pisos
La segunda ocasión en Medellín fue otro swing, ya verán...
