El autor de este poema comete dos tipos de errores métricos distintos.
Contabilizo un total de 6 fallos: cuatro de ellos por no contar con las sinalefas y dos de ellos por no contar con la adición de una sílaba que supone la finalización de los versos en palabras agudas.
Las sílabas de la métrica en textos escritos en verso difieren de las sílabas tónicas en prosa, recordando que la sinalefa es obligatoria en poesía, salvo en un par de casos excepcionales y que la adición o resta de sílabas por finalizaciones de verso en palabras agudas o esdrújulas, son también normas obligatorias.
Para todos/as aquellos/as autores/as con ganas de escribir poesía, recomiendo encarecidamente no utilizar la gran variedad de páginas o programas de contadores de versos, analizadores de rima, etc., que existen actualmente en Internet.
La mejor manera de escribir con corrección un poema, es conocer las estructuras, características de rimas y métricas, así como la gran variedad de licencias poéticas que existen y aplicarlas el autor de manera correcta, con la cierta libertad que estas últimas otorgan.